La compañía, resultante de la fusión de Bwin y PartyGaming el año pasado, dijo que había sido informada de que los operadores online con clientes en España tenían que pagar impuestos diferidos de acuerdo con dos leyes que anteriormente no habían sido aplicadas al juego online operado en lugares con ventajas fiscales.
Estas normativas, de los años 1966 y 1977 respectivamente, se han aplicado históricamente a operadores en actividades de juego y ciertos tipos de apuestas con base en España.
Bwin dijo que había completado una autoliquidación fiscal según lo requerido por la Agencia Tributaria y que iba a pagar 25,6 millones de euros más sobrecostes e intereses hasta otros 8 millones de euros.
"Tras haber dado estos pasos, creemos que ya hemos cumplido todos los requisitos y esperamos recibir nuestra licencia para entrar en el mercado español", dijo la empresa con sede en Gibraltar en un comunicado el lunes.
Por otra parte, Sportingbet Plc, otra firma de juego online británica, dijo que estaba negociando con el Ministerio de Hacienda español acerca de una posible suma fiscal pendiente por sus operaciones en el país entre enero de 2009 y mayo de 2011.
Este mismo año, Sportingbet - con más de 2 millones de clientes en 30 mercados - dijo que se había reunido con el regulador español del juego y que esperaba conseguir una licencia en mayo.
Visto en www.eleconomista.es
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