Mientras la economía real se comprime, la virtual se expande. Las franquicias de transporte y mensajería, cuyo negocio dependía casi directamente de la evolución del PIB, ven en este cambio una oportunidad de recuperarse de la recesión y de posicionarse de cara a un futuro cada vez más cercano.
Dos factores, el precio y las inversiones en tecnología, son fundamentales para que estas franquicias consigan una buena cuota en el mercado del comercio electrónico –tanto entre empresas como entre empresas y particulares–.
En un sector tan atomizado, parten con ventaja por sus economías de escala y su capacidad financiera las grandes cadenas, la mayor parte de las cuales son franquicias. Así lo entiende Arménio Belo da Silva, presidente de la Comisión Ejecutiva de Tourline Express, que reconoce que el sector se mantiene estancado por “la debilidad del consumo y el descenso de la actividad industrial, así como por la fuerte competencia en precios y el alto coste de los carburantes”. Sin embargo, “el nicho del comercio electrónico crece a un ritmo de dos dígitos”.
Susana Muntaner, directora de Franquicias para España de MRW, considera que “el transporte de paquetería exprés es cada vez más dependiente del volumen que puede aportar el comercio online” (ver Tendencias). Un segmento que ya empieza a representar un porcentaje significativo en el volumen de negocio de algunas cadenas, y que supera el 20% en MRW, líder del sector.
Visto en www.quefranquicia.com
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